En la cocina ancestral la mayoría de las recetas con legumbres eran saladas, se utilizaban para guisos, sopas, ensaladas, rellenos, pero no para preparaciones dulces.

Hoy le compartimos una nueva forma de incorporarlas en la alimentación diaria.

Las legumbres son un alimento fundamental en una dieta balanceada, son fuente importante de hidratos de carbono complejos (de buena calidad), fibra alimentaria, vitaminas, minerales y proteínas de origen vegetal.

Su consumo recomendado es de dos o más veces por semana, anímate a probarlas y a hacer recetas nuevas.

Preparación:

Dejar en remojo los porotos por 24 horas, transcurrido ese tiempo, cambiar el agua de remojo y ponerlos a hervir en abundante agua limpia, hasta que se ablanden (aproximadamente 45 minutos).

Una vez cocidos los porotos, colar y dejar enfriar.

Colocar una taza de porotos ya cocidos en un vaso de licuadora o procesadora, agregar el azúcar, la pasta de maní, el cacao, la esencia de vainilla y el coco, procesar todo hasta formar una pasta moldeable con las manos; si le falta liquido agregar con una cuchara sopera agua, leche o alguna bebida vegetal, de a poco, hasta que la pasta se homogeneice.

Una vez lista la mezcla, formar bolitas con las manos y pasar por coco rallado, crocante de maní o bañarlas en chocolate amargo.

Duran de 5 a 7 días en la heladera.

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