Estudios de la Facultad de Medicina de Penn State y de la Universidad de Duke indican que las personas que se consideran fumadores ocasionales también cumplen con los criterios de la adicción a la nicotina y que, por tanto, pueden tener una gran dificultad para abandonar el hábito sin ayuda.
«Sorprendentemente, casi dos tercios de los que fumaban solo de uno a cuatro cigarrillos por día eran adictos, y alrededor de un cuarto de los que fumaban menos de una vez por semana eran adictos», argumenta Foulds.
Antes se creía que para tener adicción a la nicotina era necesario fumar mas de 10 cigarrillos por día, pero este estudio demuestra que incluso aquellos que no fuman todos los días, también son adictos.
El consumo ocasional de tabaco suele ser un estado de transición hacia otros patrones de consumo más intenso o frecuente. Este trabajo describe las características sociodemográficas, los hábitos de vida relacionados con la salud, y la historia de consumo de tabaco de los fumadores ocasionales, y examina si éstos presentan diferencias con los que consumen tabaco a diario.
Fumar poca cantidad y con menor frecuencia es menos dañino que fumar mucho, pero aún así conlleva riesgos significativos para la salud y las personas que lo hacen, también son adictos a los cigarrillos», explicó Jonathan Foulds, profesor de Ciencias de la Salud Pública y de Psiquiatría y Salud Conductual de la Universidad de Penn State.
En su trabajo, publicado en la revista científica American Journal of Preventive Medicine, los investigadores examinaron un conjunto de datos existentes de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), que incluía a más de 6.70. fumadores que habían sido evaluados para averiguar si cumplían con los criterios para el trastorno por consumo de tabaco.
Se encontro que el 85% de los fumadores de cigarrillos diarios eran adictos en cierta medida, ya sea una adicción leve, moderada o grave, reportó la agencia de noticias Europa Press.
Los fumadores ocasionales tienen características sociodemográficas, hábitos de vida e historia de consumo de tabaco diferentes a los que consumen tabaco diariamente. Estas diferencias sugieren que deben realizarse programas de investigación e intervención dirigidos de forma específica a los fumadores ocasionales.
Anteriormente en otras investigaciones, se comprobó que que quienes no fuman a diario, suelen intentar dejar la adicción antes que los que fuman todos los días. De igual manera, estos podrían necesitar de un tratamiento para dejarlo con éxito. Sin embargo, no está claro hasta qué punto la. intervenciones actuales son eficaces para los fumadores ocasionales», concluyó Oliver.